En nuestra vida social y laboral es imprescindible causar una buena primera impresion. De este primer vistazo puede depender un puesto de trabajo, un negocio, que nuestro servicio sea el escogido entre la competencia, una gratificante relación amistosa, etc...
En el modo de vestir y actuar se da a conocer la cultura, la autoestima y el respeto hacia los demás pues el porte externo es el reflejo de la personalidad y de las cualidades adquiridas por cada ser humano.
Lo fundamental es aceptarnos tal y como somos, con lo positivo y negativo que tenemos y hacer lo que esté a nuestro alcance para mejorar nuestra apariencia personal y que seamos coscientes de que esa imagen que proyectamos refleja nuestro verdadero estilo.
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